Labios anónimos
Pasillos caóticos
Caminos de ilusiones extorsivas
Rutas de tentaciones no
transitadas
Puentes de miseria y cobardía
Oscuridad refractada en pupilas
Pensamientos a medio morir
Piernas sedientas, labios cansados
Gritos a medio callar
Pasos reflejados en pieles ajenas
Dulce desesperación en marcha
Resbalar, el placer de caer
Inútil intento de seguir muriendo
Risas pisoteadas en charcos
Rostros que fingen vivir
Olores de vida nauseabunda
Filosas lágrimas ajenas en el aire
El yugo de esos ojos
Es el final de mi camino
Suave brisa gélida
Algo late y no es mi corazón
No hay miedo en las pisadas
No hay vida en sus murmullos
Me espera del otro lado, en
penumbras
La puerta a medio abrir, mi vida
entrecortada
Quien corrompe la vida
Desde un cuarto sin salidas
Quien negocia las almas
Hasta el último grano de arena
Un pedido de labios anónimos:
“No
prendás la luz”
Nicolino
01/04/10
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